.- Una sesión imprevista-.

El martes al mediodía quedé con mi Señor para comer... aunque lo más probable era que eso fuera lo último que haríamos ya que mi Señor dispondría de mi desde que llegase hasta que me fuera para hacer conmigo todo lo que deseara, para que mi cuerpo sólo fuera un juguete en sus manos... y yo estaba encantada con la idea... me apetecía muchísimo y la sola idea de mi Señor usándome como un objeto para satisfacer sus deseos hacía que todavía me apeteciera mucho más...

Así que para esta ocasión decidí llevar puesto mi corset de cuero negro quería saber qué reacción provocaría en mi Señor verme así vestida... me gustó que mi Señor me lo dejara puesto para la sesión hasta que por desgracia se hizo daño con los cierres de metal... que provocó que tuviera que quitármelo...

Mi Señor consiguió que en esta sesión perdiera la noción del tiempo, que me entregara de una manera que hacía tiempo que no lo hacía... mi Señor consiguió que me sometiera casi por completo... reconozco que fue todo un avance, dado que la noche anterior mantuvimos una conversación por mi problema de no ser capaz de disfrutar del estado mental de sumisión... y es una gran verdad... después de lo que me pasó la primera vez, en la que si cedí y no era un juego... no era capaz, sólo soy capaz de disfrutar del juego de la sumisión porque así no me pasará lo de la primera vez...

Ceder el control total de mi mente es algo que todavía no soy capaz de lograr... el bloqueo es muy fuerte todavía... y a pesar de que si que me apetece que sea así, mi mente se resiste... a pesar de todo lo que confío en mi Señor... de que sé que no me va a ocurrir lo mismo... que en sus manos estoy segura y protegida... y que nada malo va a pasarme... odio que pase esto... que mi bloqueo me frene de esta manera...

Esta vez intenté ir a la sesión calma y relajada, sin expectativas, sin nada... sólo siendo Eclipse con ganas de disfrutar y complacer a su Señor... y eso intenté y desde hacía mucho tiempo conseguí perder la noción del tiempo... no pensar... sólo disfrutar... entregarme en cada momento... y gracias a ello fue una de las mejores sesiones que he tenido a pesar de que no fue demasiado larga... pero fue intensa... sin opción a penar... sólo obedecer, complacer y entregarme como sumisa...

Recuerdo que además en esta sesión mi Señor me dijo que tenía que pedirle permiso para poder correrme... y lo curioso es que siempre le digo si me deja correr pero en esta sesión me corrigió y tuve que cambiar la manera de pedirlo... desde ese momento lo pediría diciéndole si mi Señor permitía a su putita o zorrita correrse... la verdad creo que me gustó más pedírselo así y que además en alguna ocasión me ordenara hacerlo mirándole a los ojos todavía me gustó más...

Cuando dimos por acabada la sesión recuerdo que en mis labios se dibujó una sonrisa por lo bien que me sentía, por cómo había sido capaz de someterme mi Señor... le estaba muy agradecida por esa sesión... y lo sigo estando.. mi Señor me demostró que si soy capaz de someterme casi por completo, que puedo disfrutar mucho cuando lo consigo...

Gracias mi Señor por llegar a mi vida y por aceptarme como aprendiz... eres el mejor regalo que podría tener... me siento afortunada e intentaré esforzarme cada día más y llegar a ser una sumisa de la que puedas sentirte orgulloso...