domingo, 31 de agosto de 2014

.- Una mujer sumisa -.


Ayer me ocurrió una cosa curiosa, mientras iba en el autobús oí una conversación que me llamó la atención, dos chicas iban comentando la trilogía de 50 Sombras de Gray permitiéndose hacer comentarios del estilo, "Hay que ser muy débil para permitir que un hombre te haga eso", "Tanto quejarse de la violencia de género y estas tontas dejan que un tío las maltrate"... y alguna cosa más... la verdad es que me dieron ganas de girarme y decirle que no sabían lo equivocadas que estaban... 

Esto no es la primera vez que me encuentro con algo así, tengo conocidos que sin saber del tema se permiten hablar a la ligera y criticar a las mujeres que como yo son sumisas, claro está que lo hacen en mi presencia porque no saben que están hablando con una sumisa, porque sería un poco contradictorio que a mi me digan que soy una mujer fuerte, luchadora, que aprecio mi libertad y que luego descubran que soy sumisa y tengan el valor de llamarme débil o criticarme por ser así... 

La verdad es que a veces me siento mal cuando oigo estas cosas... descubrí hace 6 años que era sumisa y me costó mucho aceptarlo y llegar a disfrutar de ello y muchas veces pienso que si mi Señor no llega estar en estos momentos en mi vida, que si no me hubiera ayudado a aceptarlo, si oyera todo lo que oigo desde que ha aparecido la dichosa trilogía de 50 Sombras de Grey me hubiera sentido mucho peor, incluso hubiera creído que estaba mal de la cabeza...

Ojalá toda esa gente que se llena la boca creyendo tener la razón creyendo saber más del BDSM que la gente que está metida en eso, se diera cuenta que ni ellos tienen la razón ni nosotros somos unos depravados... 

Yo soy una mujer libre, fuerte y si he elegido servir a mi Señor no es porque sea débil, he decidido hacerlo siendo consciente de ello, en plenas facultades físicas y mentales, es algo que completa mi vida, es algo que me libera de todo el estrés y toda la presión que acumulo en mi día a día, servir a mi Señor es mi vía de escape... gracias a lo que el me ofrece consigo tener una vida equilibrada...

Mi Señor no es un maltratador... que yo consienta que mi Señor me castigue físicamente o que me premie de la misma manera no implica que quiero ser maltratada, no implica que mi Señor pueda hacerme daño como para que mi vida peligre... a mi Señor le cedo mi voluntad para que pueda usarme como quiera, para esto necesito ser fuerte, tener claro quien soy... y sobretodo mi Señor tiene que haberse ganado mi confianza...

Confianza... una palabra esencial en una relación D/s, si yo no confiara en mi Señor, jamás sería capaz de poner mi vida en sus manos... mi Señor hace que poner mi voluntad en sus manos sea fácil, porque me siento más protegida con él que con mucha gente de mi vida no sumisa, mi Señor me cuida, me protege, no deja que nada malo pueda pasarme... 

Mi sumisión la veo como un regalo que le ofrezco a mi Señor, y si lo he hecho es porque considero que es la persona que se lo merece, que nunca pondrá mi vida en peligro, que va a valorar todo el empeño que yo ponga en complacerle y en servirle...

Ojalá toda esa gente que no sabe nada de esto pudiera abrir los ojos y ver que la sumisión no es la esclavitud que ellos se piensan, es algo que se elige por voluntad propia y que no afecta negativamente a la vida de la sumisa o del dominante... pero esto es algo casi imposible... porque la gente suele ver las cosas distintas a las que ellos hacen con malos ojos y no se molestan en conocer las cosas como son de verdad...

Soy sumisa y no siento vergüenza de ello, mi sumisión es algo que forma parte de mi y que es algo muy bueno, he decidido ser sumisa por voluntad propia y agradezco a mi Señor el haber conseguido que lo acepte y disfrute de ello... Soy una mujer fuerte que cede su voluntad a su Señor porque gracias a hacerlo ha descubierto que disfruta de cosas que de otra manera no podría... 

Ser sumisa para mi ha sido un regalo... y nunca me veréis sentir vergüenza por ello...

viernes, 29 de agosto de 2014

.- Sumisión por la fuerza -.


Ayer tuve una sesión con mi Señor que no me esperaba; pero que busqué yo para que fuera así, digamos que fui a ver a mi Señor  un poco rebelde e intentando provocarle con todo lo que le decía, sabía que siendo así iba a meterme en un lío, que me estaba ganando una sesión distinta a las que normalmente teníamos y la verdad es que por eso me comportaba así, una parte de mi quería que mi Señor me sometiera usando la fuerza como ya había hecho en otra ocasión y otra parte no era que lo quisiera era que lo necesitaba...

Pero mi cabeza no estaba de acuerdo con lo que mi cuerpo necesitaba o quisiera y empezó a sabotearme... todo iba bien mientras me resistía y era rebelde; pero en cuanto mi Señor me agarró por la muñeca izquierda y empezó a hacerme daño algo en mi cabeza hizo "click" y se me fue la rebeldía... ya no quería ser rebelde... sólo quería someterme; pero una bocecita en mi cabeza empezó a decirme que era lo que estaba haciendo, cómo podía comportarme así, cómo permitía que alguien me hiciera daño para que yo hiciera lo que el quería y no sólo eso, sino que cómo era capaz de someterme a él y estar disfrutando de todo eso... en eses momento empecé a llorar... estaba disfrutando con todas las sensaciones; pero en mi interior había una lucha... y por lo tanto no era capaz de disfrutar como la otra vez...

Hubo un momento en que mi Señor consiguió que le tuviera miedo... hasta ahora nunca se lo había tenido de esa manera... pero extrañamente no me desgradaba tenerle miedo... disfrutaba con ese miedo... pero otra vez mi cabeza volvía a jugarme una mala pasada. cómo era que disfrutara con el miedo, si le tenía miedo debería huir de él... cómo podía sin embargo estar allí disfrutando... 

Mi cabeza parecía que se había empeñado en joderme la sesión... una sesión que debería estar disfrutando como la otra vez... pero no... no conseguía dejarme llevar... no conseguía hacer callar a esa voz de mi cabeza... cuando mi Señor detuvo la sesión y estaba abrazada a él, empecé a llorar todavía más... mi Señor me preguntó qué me preocupaba... y me dijo que lo dejara salir... me costó y así lo hice; pero sólo le dije dos de las cosas que eran... por un lado todo lo que mi cabeza me decía... y por otro el miedo a entregarme otra vez como lo había hecho hace 6 años... sé que mi Señor jamás hará nada parecido a lo que me hizo el otro... pero no me siento segura volviendo a someterme de esa manera... y lo peor de todo es que quiero... quiero que mi Señor me someta de esa manera... que consiga que sea sumisa mentalmente.... pero parece que no va a ser posible...

Lo que no le dije a mi Señor porque no me salían las palabras... porque tengo miedo de pronunciarlas en voz alta... tengo miedo de no ser buena para él... que soy más una carga que algo bueno... en este tiempo que llevo con él no debería ser así... no debería pasarme esto... no sé... a veces me dan ganas de huir... me dan ganas de decirle que no soy buena para él... que sería mejor que acabáramos con esto... que debería tener una sumisa que se merezca a un Señor como es él... porque creo que no le merezco... que estaría mejor sin mi... a veces todo esto me tortura... pero entonces respiro hondo e intento tranquilizarme... y me digo que si mi Señor no me quisiera a su lado, si no me quisiera de aprendiz... ya hubiera roto nuestro contrato, ya me habría alejado de él... pero en lugar  de hacer eso me mantiene a su lado, es comprensivo cuando las cosas no salen bien, me cuida, me protege y siempre me da lo que necesito; pero a pesar de ello muchas veces siento que no soy una buena sumisa... que no soy buena para él... que soy muy poca cosa...

No es fácil admitir todo esto; pero en algún momento tenía que hacerlo y después de lo de ayer creo que era el momento... aunque sí, soy una sub cobarde que no fue capaz de decirle a su Señor todo esto... lo siento mi Señor... pero la verdad es que no quiero que esto se acabe, me encanta ser Eclipse; pero sobretodo me encanta ser tu sub y que seas mi Señor... siento mucho todo esto y gracias por estar siempre ahí!!

miércoles, 27 de agosto de 2014

.- 6 meses -.


Hace unos días, más concretamente el día 24, fue un día especial para mí y espero que también para mi Señor, hace 6 meses desde que mi Señor me dio mi nombre, desde que mi Señor me tendió su mano para que volviera confiar y pudiera disfrutar de una parte de mi que llevaba demasiados años oculta...

6 meses que se dice pronto... y sí reconozco que se me han pasado muy rápido y que cuando quiera darme cuenta llegará el día que mi contrato de aprendizaje finalice y tendremos que decidir qué queremos hacer.. que sea lo que tenga que ser... sólo espero que mi Señor me permita seguir a su lado, porque es lo que más deseo...

Todavía recuerdo cómo empezó todo esto... un fin de semana de finales de febrero y mi Señor prestándome un libro para leer jejeje "La sumisa insumisa"... qué recuerdos, todavía me hace sonreír pensar en lo ingenua que fui al empezar a leerlo y no podía ni imaginarme que hoy estaría aquí sentada frente al ordenador 6 meses después de aquello siendo una pequeña sumisa... 

Han pasado muchas cosas en este tiempo, ha habido momentos buenos y otros no tan bueno; pero incluso esos para mí has sido importantes y hasta cierto punto increíbles, porque de los malos momentos o de las malas experiencias se acaba aprendiendo y siendo una novata como era en este mundo, tenía que cometer errores; pero he ido aprendiendo de ellos... ahora me siento menos torpe con mi Señor, no temo nada ponerme en sus manos, cada día ha hecho que confíe más y más en mí misma y en él, y casi todos mis miedo por fin han desaparecido; pero también sé que aunque haya mejorado aún me queda un largo camino que recorrer y me encantaría poder recorrerlo de su mano...

Pero todo eso no habría sido posible si estuviera sola, si estos 6 meses han sido increíbles ha sudo gracias a mi Señor, sin él hoy no estaría escribiendo esta entrada y no habría empezado este blog... y no habría vuelto a disfrutar de esta parte de mi que tanto me gusta... creo que las palabras no bastan para agradecerle toda la paciencia que ha tenido, todo lo que me ha enseñado y todo lo que me ha hecho vivir en este tiempo... la verdad es que no puedo evitar que las lágrimas nublen mi vista al emocionarme con todo esto, unas lágrimas que son de alegría y que no me importa derramar... porque me siento feliz por tener al Dom que tengo y que me haya aceptado en su vida, a pesar de todos los problemas que pueda causarle...

Así que gracias mi Señor por estos 6 meses a tu lado, por enseñarme, por dejarme complacerte y complacerte, gracias simplemente por haberme dejado compartir contigo 6 meses llenos de recuerdos y experiencias que siempre voy a recordar!! Feliz semianiversario mi Señor!!!!

martes, 26 de agosto de 2014

.- Sesión después de un tiempo -.


El pasado jueves volví a tener una nueva sesión con mi Señor, ya que hacía bastante tiempo que no habíamos podido tener una en condiciones, por una cosa o por otra esto no había podido ser hasta este jueves... y lo reconozco echaba de menos llamarle Señor y complacerle en todo lo que me pidiera y deseara... aunque también he de admitir que a pesar de eso no tenía tantas ganas como otras veces... pero la cosa cambió en el momento que mi Señor pronunció mi nombre...

Cómo había echado de menos oírlo de sus labios... en cuanto lo hizo no pude evitar sonreír... me gustó volver a oírlo, me gustó mucho... como también que me pusiera contra la pared mientras me desvestía; pero reconozco que me gustó menos que me dijera  que no quería oír nada... bufff con lo que me cuesta eso... sigue siendo algo difícil para mí, por eso me encanta que me amordace porque no tengo que contenerme; pero si mi Señor me lo ordenaba yo lo cumpliría encantada...

Recuerdo cómo me hizo estremecer con sus caricias... llevándome hasta el límite, queriendo más y que no se detuviera... y me llevó al orgasmo... tuve que morderme la lengua para no gritar mientras me corría... luego me llevó a la habitación e hizo que me sentara y esperara mientras se quitaba la ropa para dejarme su polla a la altura de mi boca... echaba de menos también poder disfrutar de su polla, cada vez disfruto más haciéndolo, sabiendo que mi Señor disfruta mientras pongo todo mi empeño en complacerle ... y mi mayor recompensa es ver a mi Señor disfrutar...

Pero lo que más disfruté yo sin duda de esta primera parte de la sesión fue cundo mi Señor me dijo que iba a tomar mi culo en ese momento y después de cenar volvería a hacerlo.... reconozco que no pude evitar sonreír pero no sólo por ello, sino también porque mi Señor no dejaba de decirme lo que le gustaba mi culo... si me encanta que a mi Señor le guste mi cuerpo y que disfrute usándolo como más le apetezca.... por lo que me siento muy bien cuando lo hace... hizo que me corriera un montón de veces, dándome el permiso y otras haciendo que su putita lo pidiera, me gusta que me permita correrme pero quizás disfruto un poco más pidiéndole que me permita hacerlo, creo que porque como me cuesta tanto pedir las cosas al conseguir hacerlo hace que cada vez me cueste menos y me salga sin más, como algo natural... Aunque mi Señor me folló el culo hasta que quiso no se corrió y no sé me sentí como si me hubiera faltado algo... pero sabía que la sesión no se había terminado y esperaba que mi Señor se corriera...

Pero siempre me tiene que pasar algo... está vez fue que me quedé dormida.... si me merezco un buen castigo por ello; pero estaba tan cansada... llevaba días sin dormir bien y la sesión fue mucho para mi... pero no puedo evitar sentirme mal todavía... mi Señor haciendo que disfrutara y yo no fui capaz de dejar mi cansancio a un lado y complacerle hasta que se corriera... recuerdo que me quedé dormida con una sensación desagradable por ello... y más después de lo bien que mi Señor se porta siempre conmigo...

La segunda parte de la sesión tuvo que esperar a que acabáramos de cenar, después de ello me llevó a su habitación y me encantó que me pusiera con el culo en pompa para seguidamente follármelo... como me había dicho antes de cenar, mi culo sería suyo de nuevo y aunque reconozco que al principio me molestó cuando me metió la polla, estaba encantada con que volviera hacerlo... estaba disfrutando mucho hasta que me puse sobre él ... ya que un poco después empecé a sentirme muy cansada y mi Señor me preguntó si quería descansar y le dije que si, me apoyé en su pecho; pero al final mi Señor me dijo que me acostara a su lado y me abrazó... empecé a quedarme dormida y mi Señor me dejó dormir...

A pesar de que mi Señor me dejara dormir y no me pusiera ningún problema, cuando me desperté a su lado por la mañana me seguía sintiendo mal y todavía sigo un poco molesta y cabreada conmigo... que mala sumisa soy... me merezco un castigo, el que mi Señor desee lo aceptaré y estaré dispuesta a recompensar a mi Señor de la manera que el estime oportuna... sólo decir que lo siento mucho mi Señor.... espero que no me vuelva a ocurrir.... y gracias por tu infinita paciencia conmigo... Gracias mi Señor...